Depresión

Para saber si el Mindfulness es eficaz en las enfermedades y la ansiedad, debemos conocerlo bien. La terapia fundamentada en el Mindfulness es una intervención muy prometedora para solucionar los problemas del estado de ánimo en poblaciones clínicas (magnitud del efecto=0,95), (Hofmann y cols., 2010).

Las personas diagnosticadas de depresión responden bien al ejercicio en mindfulness y logran un efecto significativo en la mejoría de sus síntomas, con y sin otras comorbilidades médicas (D`Silva y cols., 2012).

La evidencia de que el MBSR puede ayudar a mejorar la depresión asociada a pacientes con insuficiencia cardíaca es fuerte (Woltz y cols., 2012).

  • Para los pacientes con tres o más episodios depresivos previos, la MBCT tiene un beneficio añadido en comparación con el tratamiento usual (Coelho y cols., 2007), también en la depresión mayor (Chiesa y Serretti, 2011).
  • La MBCT ayuda a prevenir la recaída depresiva en pacientes con trastorno depresivo mayor recurrente (Piet y Hougaard, 2011).
  • Cuando esta terapia se usa en personas que notan episodios agudos de depresión, proporciona beneficios muy significativos para rebajar la gravedad de los síntomas primarios, produciendo resultados similares a la terapia cognitivo-conductual (Franca y Milbourn, 2015).
  • La terapia es más eficiente que el tratamiento sostenido con medicación antidepresiva, que ayuda a reducir los síntomas depresivos residuales y la compatibilidad psiquiátrica, y mejora la calidad de vida en los dominios físicos y psicológicos; además, sin que incremente el coste promedio anual (Kuyken y cols, 2008).
  • En decir, se recomiendan las operaciones basadas en el mindfulness y, en concreto, la MBCT, para tratar los síntomas primarios en personas con trastorno depresivo (Strauss y cols., 2014), y para prevenir las recaídas (Fjorback y cols., 2011), existiendo también una base sólida para su uso en la depresión de ancianos (Kishita y cols., 2016).

Trastorno bipolar

La MBCT es un tratamiento muy prometedor en el trastorno bipolar junto con farmacoterapia.

Origina grandes mejorías en el funcionamiento cognitivo y la regulación emocional, rebaja los síntomas de depresión y ansiedad y los síntomas de la manía.

Estas mejorías se mantienen a los doce meses de seguimiento, cuando se practica mindfulness durante al menos tres días a la semana o se incluyen sesiones de refuerzo (Bojic y Becerra, 2017).

Existen también efectos significativos y beneficiosos sobre los síntomas depresivos y de ansiedad en los pacientes con este trastorno (Chu y cols., 2017).

Ansiedad

Ansiedad

Las investigaciones iniciales se realizaron con muestras pequeñas y eran metodológicamente flojos por lo que no permitían tener conclusiones sobre la efectividad del mindfulness en concreto y de la meditación en general para los trastornos de ansiedad (Krisanaprakornkit y cols., 2006).

En cambio, los análisis posteriores han permitido determinar que la terapia basada en el mindfulness es una intervención prometedora para tratar la ansiedad en poblaciones clínicas (magnitud del efecto=0,97), (Hofmann y cols., 2010).

Conforme el mindfulness se ha visto ligado a la terapia de aceptación y compromiso (ACT), en el tratamiento de estos trastornos, estas intervenciones han logrado obtener reducciones fuertes y sustanciales de los síntomas de ansiedad y síntomas depresivos comórbidos; pero se necesitan más investigaciones para verificar su eficiencia y su lugar en la práctica clínica (Vollestad y cols., 2012).

Relacionado con el estrés, se ha notado que la meditación lleva a la disminución de los marcadores fisiológicos de estrés en una variedad de poblaciones (Pascoe y cols., 2017).

En cuanto a la ansiedad social, tanto el mindfulness como la terapia de aceptación y compromiso, tienen beneficios muy significativos para rebajar la sintomatología, aunque se requiere de un mayor número de análisis (Norton y cols., 2014).

En el trastorno obsesivo compulsivo, la terapia de aceptación y compromiso, logra resultados igual de efectivos que los tratamientos usuales recomendados, como la terapia cognitivo conductual (TCC), (Bluett y cols., 2014).

De esta manera, hay señales de que la terapia fundamentada en la atención plena, es prometedora como una operación para el tratamiento del trastorno obsesivo compulsivo; en cambio, las conclusiones sacadas están limitadas por los diseños usados en los estudios y es necesaria una mayor investigación (Hale y cols., 2012).

  • En cuanto al trastorno de estrés postraumático (TEPT), hay evidencia preliminar para utilizar el mindfulness en su tratamiento, a pesar de que se requieren investigaciones más robustas (Banks y cols., 2015).
  • Diferentes trabajos reafirman la eficiencia del mindfulness y de la meditación en general para abordar el TEPT y los síntomas de depresión (Hilton y cols., 2016; Wahbeh y cols., 2014; Kim y cols., 2013).
  • El reciente análisis llevado a cabo por Boyd y sus colaboradores (2017), demuestra que a nivel neurobiológico el mindfulness restauraría la conectividad entre la red cerebral por defecto y las redes, ejecutiva central y de saliencia.
  • Para finalizar, es importante destacar que se ha planteado la utilización de las intervenciones basadas en el mindfulness para el tratamiento del trauma sexual en militares, un trastorno que afecta al 22% de las mujeres militares y al 1% de los hombres (Gallegos y cols., 2015).

Y, en referencia a la hipocondriasis (ansiedad por la salud), hay un estudio controlado aleatorizado (McManus y cols., 2012), que corrobora que la MBCT, asociada al tratamiento normal, es más efectiva que el tratamiento habitual exclusivamente.

Ayuda a disminuir la hipocondriasis de forma moderada (magnitud del efecto=0,48), tanto en el postratamiento inmediato como al año de seguimiento.

El cambio está mediado por el aumento en los niveles del mindfulness.

En Centro Mindfulness Madrid te enseñamos todo sobre esta práctica que ayuda a rebajar el estrés y la ansiedad.