Mindfulness en mi relación amorosa ¿Puede ser mejor?
¿Cómo puede contribuir Mindfulness en mi relación amorosa? Llevar una relación sana, de aceptación y sin juicios es una de tantas formas en que las prácticas de meditación impactan en nuestra vida.
La unión de dos personas que se aman suele ser duradera cuando se manejan principios trascendentales.
Acuerdos que están más allá de lo explícito y a través de los cuales se conectan emociones y espíritus.
La interconexión psíquica, no obstante, tiene sus falencias, puesto que cada uno es un conglomerado particular de sensaciones e ideas.
Mindfulness en mi relación amorosa: una experiencia centrada en el ahora
Por esto, llevar una relación enfocada en el ahora no es tarea fácil. Partiendo de los estados psicológicos normales, la ansiedad y la inconformidad son factores comunes en las relaciones amorosas.
El miedo el futuro es un determinante común del fracaso o la disolución anticipada de buenas relaciones.
Estas “buenas relaciones” son el encuentro y unión de personas con mucho en común y en gran sintonía, pero sin la capacidad para sostenerla.
Mantener andando una relación amorosa, como todos sabemos, no es tarea fácil. De allí la necesidad de conocer y practicar mindfulness.
Estas prácticas de meditación contribuyen a vivir el momento el momento presente con atención. Parte de la esencia de disfrutar una relación de pareja es eso, estar hoy.
Es hoy que somos amados y amamos, es hoy que esa persona que nos acompaña se encuentra joven y reluciente o se encuentra disfrutando de las satisfacciones que comparte contigo: carrera profesional, logros académicos, triunfos y otras. ¿Cómo no querer vivir y disfrutar esas cosas?
¿Cómo integrar Mindfulness en mi relación amorosa?
El primer paso es entender que no tenemos control sobre la vida. A veces llegamos a la frustración de que el futuro es impredecible.
¿Estaremos juntos toda la vida? O ¿Tendré que soportar esto siempre? Estar en el ahora nos permite saber que, sea cual fuere la situación futura, no tiene la relevancia del hoy.
Ese individualismo que, además, es fomentado a diario por medios de comunicación y comentarios populares, tendrá resultados.
Probablemente, pensar así, absolutamente inconscientes de lo que está pasando, nos forjará el camino hacia el final de la relación.
Cuando meditamos aprendemos a valorar lo bueno y lo malo del momento presente.
Asimismo, adquirimos la capacidad de reconocer en el otro, en nuestro compañero(a) las virtudes y a aceptar sin juzgar lo que no nos gusta.
De este modo, al contrario de convertirnos en un muro que no soporta, somos un apoyo.
Pasamos a ser una verdadera compañía pues, si existe algo que se disfruta verdaderamente es el apoyo incondicional y la aceptación de lo que somos.
La meditación mindfulness en tu relación amorosa verá efectos inmediatos. Sentarse diariamente a compartirla con tu pareja, puede ser una pauta para un nuevo comienzo pues, la consecución del equilibrio mental y emocional impactará en lo cotidiano.
¿De qué modo? Las labores del hogar perderán ese peso que suelen tener, como compromisos incómodos; al aceptarlas y realizarlas con amor, el ambiente en casa será grato. Tu hogar volverá a ser eso, ese lugar donde realmente está la tranquilidad que necesitas.